lunes, 10 de marzo de 2014

Lo que me molesta de la estupidez

         Lo que me molesta de la estupidez

            

        Saben una cosa, yo andaba ayer en una cola en el supermercado, esperando para comprar unas oreo de las tipo americano (si esas de las que nunca hay), y ocurre algo, en la fila, viene una vieja del coño (si ya verán por qué no le digo “ancianita”) y se le colea a la persona delante de mí, yo irritado por quererme largar a casa y quedarme a ver regreso al futuro 2, esto se sumó a la larga fila de arrechera que tenía cargada, ya que además, me había levantado de mal humor por tener el brazo con tortícolis de rematarme tanto de pajas el día anterior, bueno, eso fue lo que colmó el vaso, ya estaba arrecho.


              
               





               Como la maldita viveza criolla de la que se quejan los que viven en Venezuela se lamentan tanto, no tardó ni siquiera 10 segundos en la que la mujer que se ubicaba delante de mí le dijera a la vieja pajua que se había colado, ésta empezó a levantar poco a poco el tono del conflicto, del que éstas dos alimentaron como un remolino. En los siguientes momentos, la vieja empieza a hablar paja de que sus nietos esto y aquello, de que su hijo no se qué mierda y más paja, hasta el punto en el que la mujer delante de mí, deja sus cosas en el suelo y como que al parecer, le quiere dar una charla estúpida y pacífica a manera de que cree que le dará un ataque a la vieja si la insulta “muy” fuerte, eso me cautivó para escuchar el peo que se desataba en frente mío.

                  





                  Como cabía esperar, la vieja a partir de un punto se cegó y habló paja de que le dolía estar ahí, de que no podía hacer una estúpida cola de más de dos personas, y cuando se desató su poder de feminismo idiota y bananero, soltó el típico mierdero, el típico sermón cagolitroso y pedorro del que todo el mundo odia, y a manera de calmante, le dijo a la mujer que tenía enfrente. Lo que prosiguió fue decepcionante, ya que la mujer que tanto le había dicho a la vieja pedos arrugados que ese era su lugar y si quería comprar algo debía hacer cola, pues no, pasa que vino de cobarde y se fue con sus bolsas hasta otra fila, terminando así de manera cobarde, un pleito estúpido que al final, como tanto odié, la coño de madre se salió con la suya, y que al final, yo también me metí en el peo, y como ya me conocen, cuando soy hijo de puta, soy hijo de puta.

                   


                   Cuando vi que la vieja trajo un carrito completo, me di cuenta de que la mujer que le enfrentó había cometido una estupidez, yo tuve que salir al rescate, a insultar y a putear como jamás había hecho. Primero me quejé bien alto, para que en las otras filas me oyeran y luego, comencé a decir que su lugar era allá atrás, y lo dijo una y otra y otra y otra vez, hasta que tanto fue así que todo el mundo se metió en el problema, todos formando una rueda de pescado alrededor, aparte de que comencé a dar el típico discurso de que la libertad, y Venezuela es una mierda por esto, esto y por esto, dejando como culpable infraganti a la vieja coño de madre. Al final, cuando la hija de puta decidió mandar a la mierda todo, movió el carrito a un lado, batuqueando todo a su alrededor, y que al pasar por una caja registradora escupiendo al suelo, yo quise dejar la cerecita sobre el pastel, le dije que se tomara su pastilla de las 3:00, o si no le dará un ataque nervoso en el culo.

                     


                  Otro incidente de estupidez, lo viví cuando estaba en el bachillerato, creo que fue cuando estaba en 3er año, creo, pasa que una compañera de clase, en un día en donde debíamos todos presentar un examen de física, recuerdo que vino esta pajua y antes de que llegase el profesor, empezó a gritar como una cochina  (una cerda) en celo, diciendo que no, que era injusto, que era una maldad del profesor, pues en todo caso, recuerdo bien aun, la arrechera que me dio ese día, porque el profesor idiota se dejó manejar por una hija de puta como si fuera él, una muñeca sexual, haciendo todas y cada una de las estupideces que decía esta coño de su madre, en serio, que arrechera. Y lo peor de todo, es que al final y al cabo ya se las estaba arreglando para que nunca presentáramos el examen porque era malo, era una maldad, además de que ponía como excusa que los del B (la sección B) no lo habían hecho, y por eso tampoco lo debíamos hacer nosotros, siendo que al final, todo el mundo necesitaba esa nota, a no, pero debíamos pagar por la estupidez de ella, menos mal que el profesor hizo el examen otro día, sabiendo al menos no manipularse, aunque sin duda, me hubiese provocado traer un martillo a y desfigurarla a putazos, solo para que aprenda a no decir pendejadas.

              


                 Saben, esa es realmente una cosa me irrita, aparte de esa ley cagorrera de que (voz maricona) “hay no, no hay que gritarle a los muchachos, eso es muy fuerte, usss, no le peguen, solo limítense a ser manipulados como unos cabezas de huevo”, eso es lo que me hace explotar  los huevos, que no se le puede gritar o decirle groserías en la cara un coño de madre que lo que hace es fastidiar y joder, nada más, por eso que la sociedad joven de hoy día está tan cagada, porque no se les dice las vainas en la cara y no se aplica la justicia como debe ser, algo detestable.




           

           Bueno, si te gustó el post no olvides darme un like, comentar, sígueme, hazme preguntas coño, no como niños, bueno, al menos no en navidad, pero hazlo verga no te morirás por eso, espero que te haya gustado y hasta luego

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